lunes, 15 de diciembre de 2008

Queridos profesores

Carta a los Profesores del Instituto Nuevo Siglo, escrita por Heidy Hardziej (compañera y gran amiga mía) para el acto de fin de año y de fin de la secundaria



Queridos profesores,
No nos es fácil expresar todo lo que sentimos, ni tampoco lo podemos decir con unas pocas palabras como un “gracias por todo” o algún que otro “los queremos mucho”… porque hoy no alcanza.
Cada una de nuestras vidas parece deslizarse a veces por una cómoda rutina, con momentos más o menos placenteros o más o menos tristes; porque estos también forman parte de la vida.
Pero, de repente, como si nada, en oleadas suaves o rápidas, nace de lo más íntimo de nosotros la necesidad de un cambio o quizás hoy el mundo externo nos hace enfrentarnos a él.
Sí, nos llego la hora. Y hoy por hoy, a pesar del miedo, la incertidumbre, las dudas, las ansias, la tristeza que sintamos por el gran cambio que nos toca enfrentar, podemos decir que nos sentimos preparados, orgullosos de nosotros mismos ¿porque no?, listos para salir al nuevo mundo que ahí afuera nos espera y que quién sabe lo que a cada uno le tocara, o lo que a cada uno le espera.
Lo que podemos asegurar con total tranquilidad, pero a veces quizás con un poco de incertidumbre, es que tenemos las armas para enfrentarnos a él, porque ustedes nos las dieron, nos prepararon, nos las enseñaron. Y esto va más allá de los contenidos escolares que hayamos aprendido, o no, estudiado, o no; Creemos que va por el lado de las enseñanzas y los valores éticos y sociales que nos dieron, el enseñarnos a ser personas amables, respetuosas y responsables, porque creemos que el fin de la escuela también es ese. Formarnos como personas capaces de enfrentar la vida, los momentos lindos, los momentos tristes… en fin, los momentos. Buscando siempre lo mejor para nosotros, llegando a cumplir todos nuestros sueños, nuestras metas… siguiendo siempre adelante, hasta llegar al éxito, porque este está hecho en fin de los sueños y metas de cada uno.
Y nos cuesta, nos cuesta mucho separarnos de ustedes. Tantos años…tanto tiempo, tanto tiempo juntos, aunque no lo parezca. E inconscientemente nos encariñamos, nos conocimos, nos escuchamos, y aprendimos de ustedes, así como también ustedes habrán aprendido de nosotros. El aula ya se había hecho un hábito, una costumbre para nosotros. Todo fue muy lindo, siempre con paciencia, amabilidad, respeto y risas a veces de por medio. Parece imposible que hoy todo eso se termine, todo eso ya lo hayamos pasado, dejado atrás. Pero empezamos a recorrer un nuevo camino, abrimos una nueva puerta, comenzamos una nueva etapa… y quizás…una nueva vida… no?
El pensar que ya no vamos a seguir con la cómoda rutina que llevábamos de lunes a viernes durante tantos años. El pensar que ya no vamos a cruzar miradas, ni vamos a escuchar elogios o retos de ustedes… Cuesta bastante. Y capaz todavía no caemos… porque así como estamos ahora, estas parecen unas simples vacaciones…pero de a poco, con los días, con los meses, con el tiempo, vamos a sentir esa ausencia que en algún momento tuvimos tanto tiempo atrás nuestro, apoyándonos, escuchándonos, ayudándonos, o exigiéndonos por alguna materia, pero en fin, todo lo valió.
Y hoy, aunque no queramos, nos despedimos de ustedes felices, pero tristes a la vez…no es fácil soltarse de alguien que estuvo con nosotros tanto tiempo…
Algo nuevo nos espera… y en realidad no hay palabra que cumpla todas las condiciones para poder decirles el lugar que ocuparon en nuestros corazones.…
Gracias, gracias por darnos su tiempo, su espacio, por dejarnos entrar en una parte de sus vidas, si así se puede decir.
Pero así como hubo tiempo para aprender, para reírnos, para compartir, para enseñar o para estudiar hoy llego el tiempo de decirles adiós, de empezar a mirar para otro lado, de mirar más arriba, o de volar. Crecimos, sentimos, maduramos, y esto es lo que hoy somos en gran parte por ustedes.
Y porque la ley de la vida es así, nos vamos siendo jóvenes, si, pero también nos vamos siendo hombres y mujeres capaces de vivir y tomar decisiones por nosotros mismos.
Llegó el día, el momento es ahora. No nos queda más que volverles a agradecer por todo el tiempo que estuvieron a nuestro lado y por todo lo que nos dieron. Se lo agradecemos de corazón.
Se ganaron parte de nuestro corazón y es por esto que hoy les podemos decir que LOS QUEREMOS MUCHO y que siempre van a dejar una marca muy, muy adentro nuestro. Un beso y un abrazo muy grande,
SUS ALUMNOS DE 5º AÑO
-2008-

6 comentarios:

jb dijo...

Muy bueno, escribe muy bien tu amiga Heidi, realmente. No creo que se me hubiera ocurrido ni la quinta parte de esoa los diecisiete.
bueno, saludos

Popurrí dijo...

Lo sé, se lo dije yo también. Creo que lo que más bien hace es volcar sus sentimientos en papel, cosa que a mi, para esas ocasiones, se me hace bastante difícil (yo había escrito algo también, pero no sé... me cuesta un poco je)
Gracias por pasar!

ElChapa dijo...

Sí, sí..Sin duda muy bueno. Lo importante es no tal vez cuanto se le pueda ocurrir a uno sobre eso, pero si no también el hecho de que en sí se le ocurra. Los profesores son un tema complicado, no todos nos marcan tanto; no todos sienten que nos ayudan...Pero está expresado con cariño y esperanzas para lo que viene (tanto que hablamos de eso Grillito); y eso vale!

Abrazo!

Popurrí dijo...

Es que ahí está la dificultad: que sea espontáneo, que surja y que lo haga con sinceridad.
De esas charlas quedó algo pendiente, ya te voy a preguntar!
Un abrazo, gracias por pasar

mandrake el vago dijo...

Ya que estoy paso yo también, que tanto. Sí, a mí también me costaba en esos momentos. además, soy vago

Popurrí dijo...

Y, Mandrake el... je, gracias por pasar!